Versículo 1: Bendecido sea el Señor, que es bueno, y su misericordia es para siempre.
Versículo 2: Que Dios muestre su rostro a nosotros y nos conceda su bendición.
Versículo 3: Que su camino se conozca en la tierra, y en todas las naciones su salvación.
Versículo 4: Que alabe el Señor a su pueblo; que todos los pueblos le alaben.
Versículo 5: Que alaben al Señor con alegría; que canten con júbilo a su nombre.
Versículo 6: Que el Señor tenga misericordia de su pueblo; que los bendiga con su favor.
Versículo 7: Que su favor sea sobre nosotros; que toda la tierra reverencie al Señor.
Que dice el Salmo 67 ?
El Salmo 67 es una oración de alabanza a Dios por su bondad y misericordia. El salmista invoca a Dios para que su misericordia se extienda a todas las naciones, para que todos los pueblos lo alaben y reconozcan su grandeza. El salmista también pide a Dios que bendiga a su pueblo con la abundancia de la tierra y la prosperidad. El salmista concluye con una oración de gratitud por la misericordia de Dios y su bondad para con su pueblo.
Preguntas frecuentes del Salmo 67
Pregunta 1: ¿Por qué Dios es digno de alabanza?
Respuesta 1: El Salmo 67 nos recuerda que Dios es digno de alabanza porque es un Dios misericordioso y compasivo, que nos protege y nos da la victoria. El salmo dice: “Bendeciré al Señor porque ha oído mi voz y mis súplicas. Él me ha librado de la angustia, y me ha colmado de alegría”. Esto nos recuerda que Dios nos escucha y nos ayuda en nuestras necesidades.
Pregunta 2: ¿Cómo debemos responder a la misericordia de Dios?
Respuesta 2: El Salmo 67 y 27 nos dice que debemos responder a la misericordia de Dios con alabanza y gratitud. El salmo dice: “Alabaré al Señor con todo mi corazón, y contaré todas sus maravillas. Me regocijaré y me alegraré en él; cantaré alabanzas a su nombre, oh Altísimo”. Esto nos recuerda que debemos agradecer a Dios por su misericordia y amor, y alabarlo por todas sus maravillas.