1 Alaben a Jehová. Alaben a Dios en su santuario; Alabenle en la magnificencia de su firmamento.

2 Alábenle por sus proezas; Alábenle conforme a la muchedumbre de su grandeza.

3 Alábenle con sonido de trompeta; Alábenle con arpa y salterio.

4 Alábenle con panderos y danza; Alábenle con cuerdas y flauta.

5 Alábenle con címbalos resonantes; Alábenle con címbalos de júbilo.

6 Que todo lo que respira alabe a Jehová. Alaben a Jehová.

7 Alaben a Jehová desde los cielos; Alabenle en las alturas.

8 Alabenle todos sus ángeles; Alabenle todos sus ejércitos.

9 Alabenle todos los cielos; Alabenle todas las aguas que están sobre los cielos.

10 Alaben a Jehová por su obra; Alabenle por la muchedumbre de sus pensamientos.

11 Alabenle por la grandeza de su obra; Alabenle conforme a la muchedumbre de sus maravillas.

12 Alabenle con el resplandor de su santidad; Alabenle con el terror que causa su nombre.

13 Alaben a Jehová por su palabra; Alabenle por toda su obra.

14 Alabenle en la grandeza de su nombre; Alabenle con cantar y alabanza.

15 Alabenle con címbalos resonantes; Alabenle con címbalos de júbilo.

16 Que todo lo que respira alabe a Jehová. Alaben a Jehová

Que dice el Salmo 150 ?

Salmo 150 es una alabanza a Dios por su grandeza y poder. El salmo comienza con una invitación a todos los seres vivos para que alaben a Dios. El salmo continúa con una lista de maneras en que los seres humanos pueden alabar a Dios, incluyendo cantar, tocar instrumentos musicales, bailar, ofrecer sacrificios y postrarse ante Él. El salmo termina con una declaración de que Dios es el Señor de toda la creación y que todos los seres vivos deben alabarlo.

Preguntas frecuentes 

¿Qué es lo que el Señor ha hecho?

Respuesta: El Señor ha hecho grandes cosas, y ha sido exaltado por su poder. Él ha hecho maravillas, ha manifestado su amor y su fidelidad a todas las generaciones.

¿Qué debemos hacer para alabar al Señor?

Respuesta: Debemos alabar al Señor con aclamaciones, tocar instrumentos musicales, cantar himnos y cantos de alabanza, y ofrecer sacrificios de acción de gracias. Debemos honrar al Señor con nuestras acciones y palabras, y darle gracias por todas las maravillas que ha hecho.