Padre querido, Te pedimos tu protección para nuestros hijos. Cubre sus vidas con tu amor y tu gracia, y manda tus ángeles para que los guarden y los protejan en todo momento. Que tu poderosa mano esté sobre ellos para protegerlos de todo peligro y de todo mal. Que tu presencia sea un escudo a su alrededor y que tu amor los cubra como un manto de seguridad. Padre, confiamos en tu cuidado y tu amor por nuestros hijos. Te pedimos que los bendigas y los guíes en todo momento, y que los protejas de todo daño y peligro. En el nombre de Jesús, nuestro Salvador, oramos. Amén.