I. Señor, ¿quién habitará en tu tabernáculo?
¿Quién morará en tu santo monte?
II. El que anda en integridad y hace justicia,
Y habla verdad en su corazón.
III. El que no calumnia con su lengua,
Ni hace mal a su prójimo,
IV. Ni se digna a mirar con desprecio al humilde,
Ni honra a los grandes con adulación.
V. El que con su dinero no hace agravio,
Y no acepta soborno contra el inocente.
VI. El que hace justicia al afligido,
Y no desatiende la causa de su pobre.
VII. ¡Quien tal obra, jamás será conmovido!
¡Jamás será condenado!
Que dice el Salmo 15 ?
El Salmo 15 es una oración de alabanza a Dios. El salmista comienza alabando a Dios por su grandeza y poder, y por su bondad y misericordia. El salmista también se refiere a la presencia de Dios en la vida de los justos, y cómo Dios los protege y los guía. El salmista también se refiere a la importancia de la obediencia a los mandamientos de Dios, y cómo la obediencia es la clave para la salvación. El salmista termina con una oración de alabanza a Dios por su bondad y misericordia.
Preguntas frecuentes del Salmo 15
Pregunta 1: ¿Por qué el Señor es el único que merece la alabanza?
Respuesta: El Señor es el único que merece la alabanza porque es el único que es digno de toda la gloria y honor. Él es el Creador de todas las cosas y es el único que puede salvar a los pecadores. Él es el único que puede perdonar los pecados y restaurar la vida de los que confían en Él.
Pregunta 2: ¿Cómo puedo acercarme al Señor?
Respuesta: Para acercarse al Señor, debemos buscarlo con todo nuestro corazón. Debemos orar a Él con sinceridad y humildad, y confiar en Su amor y misericordia. Debemos buscar Su voluntad y obedecer Sus mandamientos. Debemos también alabarlo y glorificarlo por todas Sus obras maravillosas.